El ministro de agua y energía, Adolfo Scaglioni, brindó precisiones respecto del funcionamiento de las protecciones que revisten las líneas energéticas de alta tensión y cómo actúan ante los fenómenos climatológicos de gran magnitud, como ocurrió durante la intensa tormenta eléctrica que sobrevino sobre la ciudad Capital en la jornada de este martes por la mañana.
Al respecto, el ministro agradeció en primera instancia “el trabajo de los compañeros de EDELaR y TRANSNOA, quienes bajo la inclemencia de la lluvia exponen su vida para realizar un esfuerzo muy grande para que el servicio se mantenga o se restituya de la manera más rápida y segura posible”.
La intensidad eléctrica que se generó durante la mañana de este martes, producto de la tormenta, causó interrupciones en el servicio de energía. Ante lo cual, Scaglioni dijo que esto se debe a que “las líneas eléctricas de alta tensión tienen una suerte de pararrayos, que es un cable que va por encima de ellas, que se denomina cable de guardia y la función de este cable es que cuando se produzca una descarga atmosférica no impacte directamente sobre la línea y así evitar que esa energía se traslade a los aparatos electrónicos que comandan estas líneas”.
Además, puntualizó que “si un rayo cae directamente sobre lugares sensibles del sistema, como puede ser una línea de alta tensión o una estación transformadora, estos sistemas se desconectan automáticamente ya que esa descarga eléctrica genera un gran caudal de energía que interfiere en los sistemas haciendo que esa protección se active inmediatamente, dejando a las viviendas sin luz hasta que se pueda normalizar el sistema”.
“Si esta protección no se activa en ese momento – sostuvo el funcionario – correríamos el riesgo de que no solamente se dañe todo el sistema energético, dejando un daño muy grave con costos que pueden ser incalculables para la provincia, sino que además toda esa energía se metería directamente en las viviendas y quemaría todos los artefactos que estén conectados en ese momento y hasta pondría en riesgo la vida de las personas que habiten en esa vivienda”.
Reconoció también que “si bien es cierto que en materia energética avanzamos muchísimo, poniendo en funcionamiento obras importantísimas para fortalecer el sistema general, aun no se encuentran en las condiciones que lo esperamos para que responda de la manera más óptima posible”.
Detalló también que “en un contexto de pandemia como en el que nos encontramos, habilitamos la estación transformadora del Este, que posibilitó que se puedan conectar en el sistema veinticinco mil nuevos usuarios, mejoramos sustancialmente el piquete 63 y la estación transformadora de Patquía, que es desde donde se envía la energía a todo el sur y el oeste provincial y ampliamos la estación transformadora del Estanquito, donde La Rioja tiene el enchufe en la casa por primera vez, que nos permitió duplicar la capacidad energética que la provincia tenia, llevándola de 300 a 600 mva”.
Estas obras – expresó Scaglioni – no se logran de la noche a la mañana. Hay un equipo de trabajo que día a día se desvive para que este sistema mejore. Pero si un rayo cargado de energía cae sobre una línea, no hay sistema que resista en ninguna parte del mundo”, sostuvo.
Por último, dijo que “próximamente haremos una prueba de configuración en la red con la línea de 132 kv La Rioja – Chilecito, que esperamos que nos brinde mayor seguridad en el sistema, pero hay que tener en cuenta que cuando estas tormentas de gran magnitud presentan mucha intensidad atmosférica, las instalaciones eléctricas se desconectan inmediatamente y se vuelve a conectar cuando el sistema se reinicie en el tiempo que está determinado”.
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